El noni es el fruto de la
planta Morinda Citrifolia, arbusto de hoja perenne que puede alcanzar
hasta 6 metros de altura. Esta pequeña planta puede vivir muchos años,
incluso más que las personas. A lo mejor es esta la razón por la que se
le ha tenido al mismo tiempo, por un alimento afrodisiaco y un
prolongador de la vida.
Actualmente se puede encontrar el noni en Polinesia, Australia, Caribe, India, China y en diversos países centro y sudamericanos.
El fruto del Noni tiene el tamaño de
una patata, pudiendo llegar a pesar hasta 800 gr. Su color puede variar
entre el verde y el verde oscuro casi negro. Cuando ha madura, los
frutos del Noni adquieren un color amarillento.
Durante miles de años los polinesios han utilizado el Noni para
tratar afecciones que van desde la simple fiebre hasta el reuma o las
afecciones cutáneas. Los curanderos lo utilizaban sobre todo para
combatir la fiebre e infecciones. Aprovechaban toda la planta para
tratar todo tipo de problemas de salud. Las fiebres, las lombrices
intestinales o infecciones cutáneas por ejemplo. La raíz en infusión
ayuda a tratar la tensión alta y las flores se han utilizado para
combatir dolores oculares.
En 1947 un artículo científico de
Mary Stewart describía cómo los habitantes de Hawai solucionaban sus
problemas de salud preparando infusiones de la fruta del árbol del Noni.
El Noni es conocido y
utilizado por polinesios y melanesios desde hace más de 2000 años. Pero
el valor nutritivo y las propiedades concretas de cada tipo de Noni depende mucho de dónde ha crecido.
El suelo volcánico de Hawai,
particularmente rico en minerales y otros componentes nutritivos,
constituye el entorno ideal para el crecimiento de esta planta.
El zumo del Noni es al mismo
tiempo un estimulante de la salud y un suplemento dietético cargado de
nutrientes. No se trata sólo de un suplemento nutritivo. Es, como la
piña tropical, una excelente fuente de vitamina C, una vitamina con un
importante papel en el sistema inmunitario y en el tratamiento de
enfermedades como el cáncer. También es rico en selenio, nutriente
esencial con propiedades antioxidantes.